Una vez al mes, 2, 3, 4, 5... ¿Cuál es la medida perfecta? Si trabajas en investigación de mercados, esta es una pregunta que frecuentemente se plantean las empresas que reclutan personas para responder encuestas o participar en otros proyectos de investigación. Todos queremos encontrar la frecuencia óptima de encuestación.
En otras entradas del blog, compartimos algunos de los resultados de una investigación interna en la que realizamos un Mystery Shopping de Paneles Online. Nuestro equipo se inscribió a 10 paneles online, incluido el panel de Netquest, para comparar distintas características desde la experiencia que viven los panelistas.
En esta ocasión, comparamos cuál es la periodicidad para el envío de encuestas a los miembros que conforman el panel.
¿Existe la frecuencia ideal?
A nadie le gusta recibir decenas (o cientos) de e-mails con promociones, avisos de descuentos, newsletters todos los días. Acá se incluyen también los correos con invitaciones a encuestas.
La frecuencia de envío es clave para que las comunicaciones por correo electrónico no sean consideradas spam. Así se evitaría que se pierdan estos e-mails en el buzón de entrada. O lo que es peor, que sean bloqueados automáticamente para prevenir spam y terminen en la sección de “no deseados”.
Esta frecuencia, cuando hablamos de invitaciones a encuestas, indica el tiempo que transcurre entre dos envíos para participar. Es decir, define con qué periodicidad se realizan estos envíos.
Es un tema que da mucho para discutir, porque no existe un criterio único o un consenso sobre el número ideal de encuestas. No se ha realizado una investigación concluyente acerca de una frecuencia óptima de encuestación.
Implicaciones para el panelista
La frecuencia de envío de encuestas influye, directamente, en la profesionalización o no de los panelistas, quienes terminan contestando cada vez que tengan la oportunidad para recibir un mayor número de incentivos.
Cuatro de las diez empresas de panel online analizadas envían encuestas diariamente. Desde el punto de vista del panelista esto es bueno porque se recibe una mejor recompensa (al responder más encuestas, es mayor el incentivo).
En esa línea, algunos sostienen que el envío de encuestas con mayor frecuencia tiene sus puntos positivos. Porque a medida que el participante completa más, aprende a interpretar mejor las preguntas, las escalas, etc…
Ahora, para otros investigadores, esta práctica compromete la calidad de los datos recolectados. Por eso, aunque no podemos hablar de la medida perfecta, al ojo de varios “menos es más”.
El criterio también es defendido por otro motivo. No sólo evita la profesionalización del panelista, sino que es una medida que promueve que el encuestado preste atención. Porque, al final, son menos las invitaciones que recibe para participar.
El dilema: ¿enviar más o enviar menos?
Desde nuestro punto de vista, lo mejor es no abusar del contacto porque el envío de emails diario cansa al panelista. Además de afectar el branding y el interés del participante.
Independientemente de sea cual sea el criterio ideal, en Netquest limitamos el número de invitaciones a encuestas que recibe cada panelista, así como el total de participaciones registradas por la persona. Apostamos por una frecuencia baja de encuestación, en comparación con otros paneles online.
En nuestra investigación interna, verificamos que cuatro empresas invitan a sus panelistas a responder una encuesta por mes o incluso, son invitaciones más espaciadas. Por nuestra parte, recomendamos mantener un mínimo de un invitación al mes, para que el panel tampoco acabe en el olvido.
El panel de Netquest realiza de uno a tres envíos mensuales. Hemos comprobado que la tasa de respuesta en nuestros estudios mejora cuando se envían cada 8-14 días.
Tal como observamos en el gráfico arriba, 40% de los paneles realizan envíos diarios. Independientemente del criterio aplicado, estos paneles tienen el deber de informar al investigador que los contrata.
¿Por qué? Es un un punto muy importante que todo profesional necesita conocer: estas personas participando en sus estudios, también están completando varias encuestas al día. Y es un hecho a tener en cuenta si se quiere asegurar y cuidar la calidad de los datos que se obtienen.
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